Descubre los pueblos más pintorescos, recorre los paisajes otoñales de las Montañas de la Costa Daurada y recupera energías saboreando los placeres de la mesa y de una rica oferta cultural. La Costa Daurada te espera este otoño con todo su encanto.
La mejor tregua a la actividad frenética de tu día a día
Visita el conocido como Valle del silencio y sigue la Ruta de las ermitas. Lejos del bullicio de la ciudad, en el corazón de la Sierra del Montsant, hallarás un paraje cargado de espiritualidad que te sorprenderá. No es extraño que los monjes de la orden de los cartujos decidieran en el siglo XII construir entre esas montañas su particular Escalera de Dios, Escaladei, la primera cartuja de la Península Ibérica.
Aquí las ermitas se funden con formaciones rocosas imponentes, rodeadas de naturaleza y de calma. A sólo 3 kilómetros de Cornudella de Montsant, a los pies de los riscos que se elevan hacia el cielo, se encuentra la ermita de Sant Joan de Codolar. El recinto debe su nombre a las enormes rocas redondeadas, còdols, que la envuelven y en las que se integra, formando un conjunto impresionante. Construida por los monjes cartujos, es lugar de recogimiento espiritual y ha permanecido habitada hasta día de hoy, en que una ermitaña se encarga de su mantenimiento y hace posible su visita. Desde aquí parten muchas excursiones, como la que lleva a la Serra Major y a su punto más elevado, la Roca Corbatera. En esta época del año, las diferentes tonalidades de marrones, ocres, rojos y amarillos inundan de color la vegetación que acompaña a los excursionistas a lo largo de la ruta.
Tanto si te mueves a pie, como si decides desplazarte por la zona en coche, un lugar de parada imprescindible es Albarca, un núcleo escasamente habitado que pertenece al municipio de Cornudella de Montsant. Con espectaculares vistas a la Serra de Montsant, este fue un enclave estratégico que retiene todo su carácter con construcciones de piedra bien conservadas, callejuelas y rincones cargados de historia.
No muy lejos, en la población de Ulldemolins, la ruta por las ermitas te llevará desde Sant Antoni a Sant Bartomeu. Esta última recibe al visitante después de haber recorrido el espectacular Congosto de Fraguerau que el río Montsant va modelando a su paso. Precisamente, la cueva en la que vivió el monje asceta que da nombre al congosto, el Fra Guerau, se encuentra en el origen de la ermita. El monje construyó una capilla dedicada a San Bartomeu y con el tiempo dio lugar a la actual ermita de estilo románico. Se trata de un enclave de gran belleza en el que disfrutar del silencio, solo roto por los sonidos del agua y de la naturaleza.
Conoce Siurana, un pueblo de leyenda
Declarada Bien Cultural de Interés Nacional en la categoría de conjunto histórico Siurana puede, sin lugar a duda, ser considerada como una de las poblaciones más bellas y singulares de la Costa Daurada. Situada en lo alto de un risco, entre montañas y rodeada de enormes paredes de roca, Siurana divisa el río y el embalse de su mismo nombre y se convierte en un rincón privilegiado y excepcional.
La historia ha dejado su huella esta pequeña población gracias a su posición estratégica. Este fue el último reducto musulmán en Catalunya y, junto a los hechos ciertos y datados, el pasado de este lugar nos ha llegado, también, a través de sus leyendas. Entre estas, la que cuenta que la hija del valí de Siurana, Abdelazia, antes de someterse al sitio de los cristianos prefirió acabar con su vida saltando por un despeñadero con su caballo. El animal intentó evitar la caída, pero fue imposible.
En la roca puede verse una marca de la herradura del caballo. Ese punto es conocido como el “Salto de la Reina mora”. Cierta o no, la historia es una buena excusa para disfrutar de las vistas impresionantes que ofrece Siurana, para seguir perdiéndose por sus callejas empedradas, reponer fuerzas en alguno de sus restaurantes e inmortalizar la icónica imagen de la iglesia románica dominando el paisaje desde las alturas.
¿Te vas a perder un pueblo de calles y plazas de piedra roja?
La ruta por las poblaciones con encanto de la Costa Daurada no puede acabar sin detenerse en Prades. Ubicada a 950 metros de altura en la Sierra que lleva su mismo nombre es conocida como la vila vermella (villa roja) por el color de la piedra arenisca típica de la zona, presente en las construcciones de todo el centro del pueblo. De las murallas que rodeaban el núcleo histórico quedan en pie, en la actualidad, algunos tramos que se integran a viviendas, así como diferentes portales, como el que se encuentra junto a la singular iglesia de la Plaza Mayor.
El tono rojizo de las paredes exteriores del templo lo convierten en un elemento sorprendente y singular. Frente a él, se encuentra la emblemática fuente renacentista de los siglos XV y XVI en la que podrás refrescarte y aprovechar el momento para inmortalizar una estampa única. Desde Prades, caminos y rutas te llevaran por bosques y campos hasta otros atractivos imprescindibles de la zona como la singular Ermita de l’Abellera, que se alza en un risco aprovechando una cavidad. Muy cerca del pueblo de Prades podrás descubrir otro capricho de la naturaleza: la Roca Foradada. Si estás dispuesto a caminar algo más, sube al Tossal de la Baltasana, el punto más alto de las Montañas de Prades con unas vistas panorámicas únicas.
Gastronomía y música, un postre exquisito para tu viaje por la Costa Daurada
Tras la ruta por pueblos y paisajes con encanto entre las montañas de la Costa Daurada, puedes recuperar energías dando gusto al paladar y a los sentidos. Y es que los fines de semana de octubre a diciembre se suceden las ferias y acontecimientos gastronómicos que permiten saborear los productos de temporada.
Las Cooperativas locales llevan a calles y plazas degustaciones del aceite nuevo recién prensado, que se acompaña con otras exquisiteces de la zona. Algunas tienen una larga tradición como las Ferias de l’oli nou de la Denominación de Origen Protegida Siurana, que tienen lugar en Reus y Tarragona o las que organizan las Cooperativas de localidades como Almoster, Alforja, Valls, Cambrils y Margalef entre muchas otras.
El viaje por los pueblos con encanto, el paisaje y la gastronomía local te ofrece en la Costa Daurada un delicado postre musical este otoño. Cambrils acoge los fines de semana de octubre y hasta el 4 de noviembre, la 10ª Muestra Internacional de Jazz y Blues. Por otro lado, el Festival Accents te acercará la música de autor los fines de semana de esos meses en un gran número de municipios: Alcover, Cambrils, Falset, Mont-roig del Camp, Reus y Riudoms. Sin duda, la perfecta banda sonora para culminar una estancia cargada de encanto en la Costa Daurada.
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